Resumen de indicadores de coyuntura

Durante el cuarto trimestre de 1999 la economía madrileña muestra, con respecto al tercer trimestre, una estabilización de su crecimiento en el marco de un perfil caracterizado por una ligera desaceleración a partir de un máximo de actividad situado en torno al primer semestre del presente año.

Por el lado de la oferta destaca el comportamiento del sector industrial que da indicios de reactivación en el cuarto trimestre de 1999, mientras continúa la desaceleración del sector de la construcción, ostensible desde el segundo trimestre de 1999, aunque matizada en el cuarto trimestre por la evolución positiva de algunos indicadores de actividad. El sector servicios muestra una ligera desaceleración de su tasa de crecimiento, extensible tanto a los servicios destinados a la venta como a los no destinados a la venta, lo que supone el mantenimiento de la tendencia observada en anteriores trimestres.

Desde la perspectiva de la demanda los indicadores disponibles apuntan a que durante el pasado año se mantuvo firme el crecimiento de la demanda interna, en el que destaca especialmente la evolución muy favorable a lo largo de 1999 de la inversión en bienes de equipo. La tasa de variación interanual de las importaciones de bienes de capital ha registrado valores crecientes, alcanzando en el bimestre octubre-noviembre un 41,1 por cien. El componente de construcción muestra, en cambio, signos de clara desaceleración en sus altas tasas de crecimiento a partir del segundo trimestre, si bien en el cuarto trimestre se producen signos que apuntan a una amortiguación de esta desaceleración.

La demanda externa en la Comunidad de Madrid muestra en el cuarto trimestre, a falta de la información correspondiente al mes de diciembre, un crecimiento notable de las exportaciones, 17,6 por cien de variación interanual, aunque ampliamente compensado por el crecimiento de las importaciones para el mismo período, 23,2 por cien. Para el conjunto del año, hasta el mes de noviembre, se observa que el saldo comercial deficitario experimentó un incremento del 21,0 por cien, con respecto al mismo periodo del año anterior, frente a un crecimiento del 18,0 por ciento durante 1998. Un aspecto destacable es la significativa aceleración de las importaciones de bienes de capital durante 1999, que contrasta con la evolución mas moderada de las importaciones de bienes de consumo. Esta circunstancia, por lo que supone de rearme del potencial productivo de nuestra región, se configura como un elemento muy positivo en aras a la consecución de un crecimiento equilibrado y sostenido.

Para el conjunto del año, se estima que la economía madrileña ha alcanzado una tasa de crecimiento próxima a la de 1998, cifrada en un 4,5 por ciento, lo que se ha traducido en una evolución muy favorable del empleo y una tendencia acelerada en la reducción del paro.

Según la EPA durante el cuarto trimestre del pasado año continuó la evolución positiva de la ocupación, que creció a tasas interanuales similares a las del tercer trimestre, mientras la reducción del paro experimentó una ligera aceleración.

El mercado de trabajo madrileño durante el año 1999 ha tenido una evolución muy favorable, superior a la de España, en términos de creación de empleo y de reducción del paro. El análisis del comportamiento de las variables básicas, con independencia de la fuente utilizada, corrobora esta afirmación.

De acuerdo con la Encuesta de Población Activa, el crecimiento de la ocupación durante el pasado año en la Comunidad de Madrid ha sido del 6,9 por cien (4,4 por cien en España), mientras el paro se ha reducido en un -20,9 por cien (-15,3 por cien en España).

EPA: Población mayor de 16 años

El descenso del paro registrado en la Comunidad de Madrid, según los datos del INEM, ha sido del -16,6 por cien, lo que significa cuatro puntos más de disminución que en el conjunto de España (-12,6 por cien).

Los datos de afiliación a la seguridad social también muestran un comportamiento más positivo en la Comunidad de Madrid que en España. Para el conjunto del año la tasa de crecimiento de la variable trabajadores en alta laboral en la seguridad social se ha situado en un 6,2 por cien, frente a un 5,5 por cien en España.

Regulación de empleo, convenios colectivos y fondo de garantía salarial

La evolución de los precios de consumo durante este trimestre ha venido marcada, principalmente, por el encarecimiento del petróleo, alcanzando en diciembre una tasa de 2,8 por cien, una décima menos que en el conjunto de España. En la Comunidad de Madrid, en el mes de diciembre, los componentes más inflacionistas del IPC han sido los de Transporte (4,7 por cien), Otros (3,9 por cien) y Vivienda (3,3 por cien).

Indicadores monetarios y financieros

La economía española, según los datos de la Contabilidad Nacional Trimestral de España, experimentó en el cuarto trimestre del pasado año una elevación del PIB del 3,9 por cien, lo que permitió alcanzar para el conjunto del año un crecimiento del 3,7 por cien.

El crecimiento experimentado en el cuarto trimestre ha estado sustentado por la menor contribución negativa de la demanda exterior, ya que las exportaciones aumentaron un 10,7 por cien frente a un 11,8 por cien las importaciones. En el tercer trimestre estos valores fueron 8,7 por cien para las exportaciones y 12,7 por cien para las importaciones.

La demanda interna experimentó un incremento notable del 4,3 por cien, aunque en el marco de una tendencia a la desaceleración. Los dos componentes de la demanda final tuvieron comportamientos dispares en el cuarto trimestre, así mientras el consumo final creció un 3,3 por cien, la inversión aumentó un 7,0 por cien.

La evolución del PIB durante el pasado año confirma que la economía española se encuentra asentada en la fase expansiva de un nuevo ciclo, cuyo mínimo se situó en el primer trimestre. El mantenimiento de un alto nivel en los componentes de la demanda interna, aunque con tendencia a la desaceleración de todos sus componentes, y la fuerte recuperación de la exportaciones están en la base de esta senda de crecimiento.

El crecimiento del PIB en la zona euro se ha situado en el 3,1 por cien en el cuarto trimestre ( 2,2 por cien para el conjunto de 1999), lo que se traduce en 1,5 puntos menos que en España. En los últimos meses del pasado año se ha confirmado la recuperación de la actividad económica en el área, basada fundamentalmente en la evolución de las exportaciones, apoyadas en un euro débil. Para el conjunto del pasado año, Francia alcanzó un crecimiento del PIB del 2,7 por cien, y Alemania del 1,5 por cien. Este último país experimentó una tasa de crecimiento de 2,3 por cien en el último trimestre del año.

En la zona euro la tasa de inflación ha alcanzado en diciembre un 1,7 por cien (1,1 puntos menos que en España), de acuerdo con la evolución de los respectivos IPC armonizados. El dato de Enero, disponible cuando se elabora este informe, indica que se ha producido un repunte de la inflación en la zona euro, que ha alcanzado una tasa de 2,0 por cien, frente a un 2,9 por cien en España. Este repunte se ha debido a la citada debilidad del euro y a la escalada de los precios del crudo. Considerados como factores coyunturales, la cotización internacional del petróleo ha subido hasta alcanzar los niveles de 1991. Estos factores hacen previsible una inmediata subida de los tipos de interés, y de mantenerse la escalada de precios del crudo en los próximos meses obligará a revisar las previsiones de inflación del presente año.

El PIB de Estados Unidos experimentó un incremento del 7,3 por cien en el cuarto trimestre, lo que ha situado el crecimiento para el conjunto del año en un 4,2 por cien. Este crecimiento está sustentado en el fuerte crecimiento del consumo, que está originando tensiones inflacionistas que anticipan próximas subidas de los tipos de interés.

En Japón se redujo el PIB un 1,4 por cien en el cuarto trimestre, lo que se ha debido, en gran medida, a la atonía del consumo interno, que cayó un 1,6 por cien en el citado trimestre. Este resultado determina un crecimiento del PIB de sólo un 0,9 por cien para el conjunto de 1999.

En lo que se refiere a previsiones económicas, según Funcas el crecimiento del PIB en España durante 2000 será del 3,9 por cien. Hispalink considera una desaceleración de la actividad en España estimando para este año una tasa de 3,2 por cien. La misma fuente prevé para 2000 un aumento del 3,7 por cien para la Comunidad de Madrid, a partir de un 3,8 por cien estimado para 1999.